Cuando eres una estrella adolescente es todo un choque emocional ya que la fama tiene la tendencia de nublar la mente, eso lo podría afirmar Demi Lovato. Quien a los 18 años lidió con trastornos alimenticios, drogas y abusó de alcohol, además en 2010 fue diagnosticada con un cuadro de trastorno bipolar.
Tal vez recuerdes Sunny Entre Estrellas, el show que mostró la vida de una chica con el sueño de saltar a la fama y ser comediante que por cierto protagonizo Demi, se dice que fue cancelado cuando Lovato tomó la decisión de ingresar a una clínica de rehabilitación después de golpear a uno de sus bailarines en una gira que hizo como solista.
Aunque muchos de sus fans terminaron con el corazón roto por esta decisión, todo fue para bien ya que ahora esta completamente recuperada y en sus últimas publicaciones de Instagram puede verse feliz, hace poco compartió un conmovedor mensaje con todos sus seguidores.
En una entrevista con la revista American Way, ella declaró que la fama no fue su único problema ya que siempre estuvo rodeada da “fantasmas” en su entorno familiar. Su madre pesaba 40 kilos cuando ella tenía 3 años y su padre tenía problemas con el alcohol y el juego.
Ahora, sólo quiere volver hacer música, y uno de sus mejores amigos la acompaña en esta decisión, Nick Jonas.