Geometrías que imitan la forma de la vid y el follaje, así como el grafismo inspirado en motivos bizantinos. Delicadas aplicaciones de encaje, proporcionan a las prendas un efecto tridimensional. Si se mira con atención, dentro de cada bordado se encontrará una flor, el eterno emblema de la Casa Elie Saab FW 15/16.
Sarah lució para el estreno de Broadway de Hamilton un vestido de esta colección y nos hizo recordar Sex and the city donde ella siempre se podía ver a la moda. Sin duda una pieza digna para una noche estrellada en Manhattan.